8 de diciembre de 2013

Un corazón libre

"... si el corazón de una mujer está libre, un hombre puede albergar esperanzas."
Drácula, Bram Stoker


Hace poco leí esta frase en Drácula, me encantó y me dio qué pensar. Me gustaría desarrollar la interpretación que yo le di. 
Mi interpretación no está cerrada a los casos en los que la mujer tenga un cierto compromiso como el noviazgo o un compromiso tan firme como el matrimonio. Mi sentido de corazón "libre" estriba en si habita en el corazón de  una mujer libre de compromiso un interés, una esperanza, una ilusión, un anhelo proyectados sobre una persona, un hombre en éste caso. Un corazón libre, un corazón "vacío" en éste sentido es susceptible de ser llenado fácilmente. Puede colmarse si un hombre lleno de esperanza se lo propone. Aunque como casi todo en la vida, habrá excepciones.
Habrá casos en los que la esperanza de un hombre se habrá desvanecido con un negativa. Es normal que no albergue esperanza pero, como he dicho, si el corazón de esa mujer continúa sin nadie que lo haya colmado y el sentimiento y afecto del hombre ha permanecido imperturbable, la esperanza podrá mantenerse e incluso crecer.
Se achaca a las mujeres que somos como una montaña rusa, lo que muchas veces nos lleva a tomar decisiones precipitadas de las que luego nos arrepentimos.
¿Qué hacer? Dejar que nos llenen el corazón. Con detalles, con gestos, con miradas. El desinterés se ha esfumado y la concepción que tenemos de ese hombre cambia con una declaración sincera y atrevida.
¿ Cómo no dejar que te llenen el corazón unos exquisitos modales en la mesa, una voz rasgada, una sombra alargada, unas manos masculinas y expresivas, una sonrisa infantil, una actitud caballerosa, una chistera, un " Lady Hester"?
¿Qué mujer queda impasible ante un hombre que te espanta un molesto insecto aun a expensas de que le pique, ante un hombre que ha saboreado cristalinas y puras aguas, ante un hombre que sacrifica su comodidad por la de los demás, ante un hombre que cumple tu capricho de contemplar la ciudad desde las alturas una noche de verano, ante un hombre que es comprensivo y que dice lo que necesitas oír en malos momentos, ante un hombre que utiliza la palabra "decimonónico", ante un hombre al que nunca has oído una palabra malsonante, ante un hombre que es "caballero" da igual de qué, ante un hombre humilde, sensato y de principios tan firmes como una roca?
Se pueden enumerar un sinfín de cosas más, aunque hay hombres a los que no se les puede hacer justicia ni con miles de palabras.
¿Qué hacemos ante esto?
SUCUMBIR