20 de mayo de 2012

Si no.

  Si no existiera Granjafría no sería campera.
  Si no existiera la lluvia no olería el verde campo.
  Si no existieran los libros no sería sensible y romántica.
  Si no existiera el color rojo no habría amapolas.
  Si no existiera la brisa los árboles no cantarían.
  Si no existiera la música no bailaría.
  Si no existieran los murciélagos no tendría ninguna fobia.
  Si no existiera el papel las palabras volarían.
  Si no existiera el mar no habría manera de navegar.
  Si no existieran las flores la primavera no sería tan bien recibida.
  Si no existieran los sexos no habría lágrimas de amor, ni para bien ni para mal.
  Si no existieran los pájaros no tendíamos que envidiarlos por volar.
  Si no existieran los caminos nos perderíamos.
  Si no existiera la amistad nos sentiríamos en continua soledad.
  Si no existieran los relojes quedaríamos al amanecer.
  Si no existiera la familia no tendíamos raíces.
  Si no existiera el sufrimiento nunca aprenderíamos.
  Si no existieran los animales parte de nosotros tampoco lo haría.
  Si no existiera la noche no veríamos a la luna brillar.
  Si no existiera el fuego no conoceríamos el poder que tiene.
  Si no existiera la religión no tendríamos sentido.
  Si no existieran la garzas desconoceríamos uno de los sinónimos de elegancia.
  Si no existiera el Derecho es posible que hubiera más Justicia.
  Si no existieran los padres nos perderíamos los mejores consejos.
  Si no existiera el verde no habría naturaleza.
  Si no existiera la nieve nos perderíamos una gran diversión.
  Si no existiera la tinta no habría plumas.
  Si no existieran las hormigas no existiría el concepto de organización.


  De lo pequeño a lo grande, de lo abstracto a lo concreto, lo de lo importante a lo insignificante.
  Todo, absolutamente todo, nos enseña, muestra y aporta algo.

4 comentarios: